Qué lindo sería brindar solos cada tanto, brindar por todos pero también por nosotros. Por todo lo que atravesamos, por cómo lo hicimos y por todo lo que logramos. Todos esos logros que muchas veces quedan en el cajón del olvido mientras solo nos detenemos a reprocharnos todo lo que hacemos mal. Nos centramos en lo que no nos sale hoy, lo que no estamos logrando tan fácil como hubiésemos querido, nos martirizamos por cada paso en falso que damos sin detenernos ni un minuto a pensar todo lo que SI logramos, todos los pasos que dimos, cuánto avanzamos, todo lo que aprendimos en el camino y cuánto crecimos a raíz de esto.
Deberíamos darnos las gracias. Darnos un poco de espacio para poder dimensionar todo eso, un descanso bien merecido, unos mimos, un stop de problemas ajenos y cuestiones rutinarias. Darnos las gracias por ese mismo espacio y por lo mucho que lo vamos a disfrutar.
Cuando logramos verlo y dimensionar todo eso es imposible no sentirnos feliz al respecto. Sentir una enorme felicidad por todo lo vivido, todo lo superado, todo lo aprendido y sobretodo por lo que viene, todo lo que queda por vivir. Y ahora desde otro lado, más conscientes, más despiertos.
Creo que una vez que encendemos la luz todo lo que viene siempre va ser para mejor. Porque los problemas dejan de existir, cada situación incómoda que nos toca vivir no es más que una oportunidad de ver algo nuevo, de resolver algo en nosotros, una herida, una carencia, una astilla más que nos queda pero que de a poco van a ir desapareciendo. Los asuntos de la realidad pasan a ser asuntos de la vida, los asuntos de los demás no me incumben y solo tengo que ocuparme de los míos, que pasan a ser tanto menor cuando dejamos de verlo desde el ego. Y si alguna vez se torna más difícil de lo que esperamos simplemente podemos dejar la situación en manos del universo.
«Sólo puedo identificar tres tipos de asuntos en el universo: los míos, los tuyos y los de Dios (y para mí, Dios es la realidad).»
Byron Katie
Soltar, dejarlo ir, es ahí cuando la magia ocurre. El desenlace nos va a sorprender, no solo por lo sencillo que fue sino tambien por lo bien que se sintió desentenderse y dejarlo ser. Es importante entender que el presente es perfecto tal y como es. Si, perfecto. Todo está dado para que aprendamos algo de la situación que nos toca vivir, está en nosotros verlo. Para así ayudarnos a manejar nuestras emociones, a superar nuestros miedos, a ser cada dia mejor que ayer.
Nuestro presente está dado así para ayudarnos a crecer. Así que cuando algo no te guste o te angustie detenete a preguntarte por qué. Qué de esa situación te hace mal? qué cambiarías? por qué? a qué te recuerda? vivíste algo parecido alguna vez? anda ahí. Saná ahí. Y liberate para vivir el hoy de la mejor manera.
De repente todo se hace tanto más fácil. Ves las cosas tanto más claras que ya no podrías volver a angustiarte en una situación igual. Y felicitaciones, ahí estarías al fin sanando una herida emocional e inconsciente del pasado. Y con eso haciéndote cada vez más libre, más grande, más auténtico.
A cada paso hay algo nuevo por aprender. Y lo mejor que podemos hacer es soltar y confiar. Dejarlo fluir, confiar en tu instinto, dejarte ser. Y que importante es esto: Dejarte Ser.
Las trabas caerán una a una y cada vez más rápido. Los miedos, la desconfianza, la ilusión, la búsqueda de aceptación constante, las presiones, la autoexigencia, el querer y necesitar hacer todo bien y que no haya posibles errores. El querer ser perfecto ante la mirada de los demás.
Y si simplemente somos nosotros mismos? y si respetamos nuestra esencia y simplemente hacemos lo que sentimos y actuamos como nos nace?
Si dejamos de actuar condicionados por los demás y lo que se espera de nosotros no solo nos sentiríamos mucho mejor con nosotros mismos sino también les daríamos la posibilidad de conocer nuestra mejor versión, la verdadera.
Construiríamos relaciones auténticas de una forma más fácil. Eliminaríamos el estrés de no saber cómo actuar y qué hacer. Las respuestas están y estarán SIEMPRE en nosotros mismos. No hace falta que busquemos más allá.
Generalmente nos terminamos complicando la existencia cuando la realidad es TANTO más simple. Hay tanto detrás de esa palabra tan de moda que es SOLTAR. Ojalá todos pudiésemos soltar con más facilidad para ahí si amarrarnos a lo verdaderamente importante que es nuestra esencia, nuestra felicidad.
«La vida nos pone en el camino de las experiencias que más necesitamos para la evolución de nuestra consciencia. Cómo saber si ésta es la experiencia que usted necesita? Porque es la experiencia que está viviendo en este momento.»
Eckhart Tolle